jueves, 30 de septiembre de 2010

Todos sabemos que en ciertas ocasiones, quizá momentos contados,quizá constantemente, quizá continuamente; necesitamos un te quiero que provenga de algo más que un amigo, de esos que se asemejan a un terremoto, a la sensación de "aquí viene la tormenta". Que te digan te quiero de la forma que ya está perdida, que te lo digan con el viento jugueteando como si fuera un pequeño animal en la arena, que te lo digan con el Sol, que sonríe en todas las caras incoentes, que te lo digan con las plantas cubiertas con repentino rumor, que te lo digan con el agua, con la alegría, con el miedo, con el hastío, que te lo digan entre palabras difíciles y que aun así no baste, que te lo digan más allá del olvido.
Por favor, ven como si fueras una nota efímera, como algo que yo nunca escribí, y que sea tóxico.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Se llamaba Chico, o así le llamaban sus amigos de aquel antro en el que tocaban jazz. Nunca supe su verdadero nombre... Pero ¿qué mas da?. Me dio algo mucho más importante, la lección más valiosa, y rara, que me han dado en la vida. Se acercó a mí con esos aires de pájaro libre, que viene, que va, que esquiva todo, que nunca para. Alguno de sus amigos susurró que en Viena estaba cantando Ella Fitzgerald. Bien, mientras chascaba los dedos y sonreía de aquella manera, cantaba, o recitaba, o acompañaba a aquel viejo saxofón, y la letra era esta:

No es necesario tener dinero para actuar en este mundo. No es necesario ser delgada, si es que quieres ser mi chica. Sólo debes estar feliz, aunque a veces cueste. Sólo recuerda sonreír, sonreír, sonreír, es suficiente para empezar. Así que si no vistes bien, no te deprimas, y si tu vida no es cocinar, aquí habrá mucho pescado. Sólo debes estar feliz, así que no frunzas el ceño. Sólo recuerda sonreír, sonreír, sonreír, y pon el mundo a girar. Sólo recuerda sonreír, sonreír, sonreír ¡Vamos! Enséñanos los dientes y lo que llevas dentro. Porque todos tienen problemas, así es como la historia avanza, no es necesario usar telescopios, para ver que hay más allá de tus “no”. Porque si te sientes feliz, esa es la forma de salir adelante. Sólo recuerda, sonreír, sonreír, sonreír. Eso hará las cosas más fáciles, cuando te sientes mal.

Guiñó un ojo, el izquierdo, y se fue, con la sonrisa aún en su cara.

martes, 28 de septiembre de 2010

Imagináte esto, imáginate un banco que cada mañana, te deposita en tu cuenta 86.400.000 euros, pero que no te permite que dejes un saldo, de modo que cada noche retira el dinero que no pudiste gastar durante el día. ¿Que harías?

Pues naturalmente, intentarías gastar hasta la última moneda de céntimo. Pues bien, todos tenemos ese banco. ¿Y sabes cómo se llama? Se llama tiempo. Todas las mañanas te da 86. 400 segundos, y cada noche se queda los ratos que no empleaste, los que ni siquiera has utilizado.

Cada día se abre una nueva cuenta para tí. Cada noche esa misma se quema con todo lo que no has vivido. Si no decides utilizar los depósitos de cada día, la pérdida es sólo tuya. No hay marcha atrás y no quedan depósitos para el día siguiente, así que vive con ellos día a día. El tiempo no para...

sábado, 25 de septiembre de 2010

No me gusta ese momento en el que sabes que te vas a poner a llorar. Tu cabeza se nubla, al igual que tus ojos, y tienes algo más que un nudo en la garganta. Bajas la cabeza, aprietas los labios, y la primera lágrima cae por tus mejillas. Y no puedes pararlo, por mucho que lo intentes. Y bueno, no se trata ya de lágrimas pequeñas, son lágrimas grandes y opacas que hacen que tus ojos enrojezcan y tu cuerpo tiemble. Y sigues sin poder parar de llorar, aunque te tumbes en tu cama. Comienzas a pensar lo que podrías haber hecho y no hiciste, pero tampoco puedes parar el dolor.
Para esto, para a esto, por favor.

No hay nada que puedas hacer, no hay nada que puedas decir; porque estas lágrimas no son  el dolor que se puede hablar, es ese tipo de dolor que necesita ser llorado. Además, también sabes , que estando así, hieres a la gente que te quiere, pero no puedes parar. Y hay momentos en los que tampoco te importan.

Créeme, se lo que se siente.

lunes, 20 de septiembre de 2010

Máscaras.

No me gustan las máscaras exóticas, ni las máscaras sueltas ni las desprevenidas, ni las amordazadas, ni las escandalosas. Me gusta la indefensa gente que da la cara, y   nos ofrece su mueca más sincera. Y llora con su pobre cansancio imaginario,y mira con sus ojos de coraje,  de miedo, o de alegría. Me gustan las personas que sueñan sin careta, y no tienen miedo de sus propias expresiones. Esas que por la noche miran, pero miran con todo el cuerpo. Las máscaras no sirven como segundo rostro. Nunca se ruborizan, sus mejillas no se sonrojan, y éstas no ostentan lágrimas de entusiasmo. El mentón ni siquiera les tiembla, de soberbia o de olvido...

martes, 14 de septiembre de 2010

All good things come to and end.

Salvador Dalí.
Todo se termina. Todo tiene un principio y un final. ¿Y qué es el tiempo? ¿Qué diferencia hay entre un minuto y una hora? ¿Qué puede ocurrir en una hora que no pueda ocurrir en un segundo? El tiempo. ¿Por qué podemos caminar hacia una dirección y volver a la posición inicial, y no viajar en el tiempo?
Dicen que el tiempo es pasado, presente y futuro, pero el pasado y el futuro no existen como tal, no son. Sólo existe el presente, lo que sucede  ahora, en estos segundos, en estos minutos o en estas horas, pero es algo que constantemente desparece entre dos nadas, sin apenas durar. Lo que hacíamos hace un instante es pasado, ya no existe, ya no es presente, sólo es un recuerdo. ¿ Y el futuro? El futuro tampoco existe, son suposiciones de lo que ocurrirá en otro presente. Podemos ir deprisa, pero no huir del presente. Opino que el tiempo no existe. No hay, es sólo el método por el cual medimos eso de nuestro alrededor.

lunes, 13 de septiembre de 2010

Él no estuvó aquí cuando le necesité, no, el nunca estaba aquí. Su reputación le precedía. Él siempre estaba fuera de la ciudad, nunca importó si me abía defraudado,y no me importaron sus mentiras. Y ahora todo lo que se, es que me quiso mucho, fue mi héroe disfrazado.
Así que, estoy agradecida de no haberme dado por vencida. Oh, no creeríais algunas cosas de las que hizo. Y todo el mundo decía que tendría que darle un tiempo, y estoy contenta de habérselo dado, porque ahora todo está bien. Así que, ¿ves? nunca creí que fueras alguien constante en mi vida.
Puedes pensar que no me enseñaste mucho, y no es así, me enseñaste a diferenciar el bien del mal. Y fue cuando no te mantenías en contacto, eso me enseñó a ser fuerte.

jueves, 9 de septiembre de 2010

"Ha llegado el momento de correr y no mirar atrás. Seguir los pasos de la gente que te ha ayudado a andar. Reunir la fuerza que te queda para regresar. Asumir que hay cosas que podrás hacer y cosas que no harás jamás. La luz que escondes tras tus ojos debería perseguir nuevas formas de placer que aún tienes que descubrir. Es mejor caminar en silencio que darse la vuelta y huir. Aunque el nuevo amanecer se desvanezca y la introspección no parezca en realidad más que una colección de atrocidades, el corazón y el alma serán eternos, durarán más de veinticuatro horas y lograrán superar todas las décadas de dolor que van a imponernos los líderes de los hombres. Puede que te parezca que te va a vencer el desorden e incluso a veces vas a perder el control. Recuerda ese ideal por el que vives, transmite los sentimientos que van a partirte en dos. Cuando las almas de los muertos te persigan en tu aislamiento, olvida la tentación del señor y de las efemérides. Acércate. "

miércoles, 8 de septiembre de 2010

Entonces, ¿cuál será el punto a tratar si mi destino es fallar?

A veces siento que el mundo está en mis hombros, y es demasiada presión para sostenerlo, y seguir. Es un cuento penoso y solitario, es el cuento de siempre, la historia de hadas que nunca termina y de la que nunca salimos vivos. Entonces, ¿cuál será el punto a tratar si mi destino es fallar? Estoy en la carrera de todo el mundo, donde los soles y las lunas chocan. Pero sobreviviré. Bueno, debo sobrevivir.
Las noches son largas e inquietas, y sí, se que siempre hay peligros en alguna parte cercana y no, no digo que sea una heroína. Pero estoy preparada a enfrentarme al miedo. Vamos a enviar a todo el mundo hacia nuestro ejército de alegría, porque sobreviviremos, se que sobreviviremos.
Y nunce cederemos el mal de no perdonar, ¿me oyes? Nunca.

martes, 7 de septiembre de 2010

Segunda parte.


Ella está que se duerme, y todo sobre lo que piensa se resume en tí. Cuando ella está dormida, todo por lo que respira eres tú. Eres todo por lo que ella vive, no tiene mucho para dar.  Ella se sienta sola, coge el teléfono y habla sobre su hogar roto. Y no sé que debería decir porque está llorando, y se siente arrojada, fuera de todo.
No duraría un día más.
Está subiendo las escaleras, él no sabe que la lastimó mintiendo, y ella sigue en el piso junto a la puerta, pero está cerrada, porque sabe que volvería a por más. Es  muy tarde, para darse cuenta de que había cometido errores. Por favor, sálvala, ha estado esperando durante mucho tiempo, y el dolor ha sido largo.

sábado, 4 de septiembre de 2010

Sunny side of the Street.

¿Cómo? ¿ No me crees? Te enseñaré algo la próxima vez que nos encontremos en la parte soleada de la carretera. Allí hay tantos colores como números, que hay que mantener vivos. Está a pocos pasos de la sombra, a esos pocos pasos donde entregarás tu corazón,y es la parte fácil de encontrar. Así que cierra los ojos, vete escuchando latir, y encontrémonos en la parte soleada de la carretera.

viernes, 3 de septiembre de 2010

Poi ti fermi. Si sospiro. Guiderà nel furgone vecchio della mamma e sarà il tempo. E si andrà. Sei cresciuto. E falar com o rádio quebrado que hippie van. Você vai perder sua namorada, principalmente o rabo. Mas você vai dizer que o homem "Ei, existe vida além da Clementina". Há vida para além dela. Mais mulheres. Mais rock, mais música.  Più rock, la musica di più

Más rock, más música.

jueves, 2 de septiembre de 2010

Renuncio.

No soy diferente; tampoco soy igual. Fácilmente me encariño con las cosas que me demuestran aprecio, un poco de amor, supongo que me gusta que sea recíproco. Me cuesta creer que me quieran. Una frase que dijiste sin pensar y a la que tú no le das mayor importancia, para mí puede suponer un mundo; mi mete puede dejarla caer en cualquier inesperado momento, y pienso. Soy tozuda, cabezota. Callada, sonriente y distante cuando la ocasión lo requiere. Me miro mucho las manos cuando estoy sola en lugares públicos, sólo para dar la impresión de estar entretenida, sólo por eso. Adoro el maquillaje de ojos, el eye-liner negro sobretodo. Puede parecer superficial, bien, para mí no lo es; me hace sentir protegida. Soy fiel a mis amigos, o eso creo yo. Y fea, soy fea. Toco la guitarra, pero no soy un portento musical.  Dibujo, pinto, pero mucha gente lo hace mejor que yo. Y creo que se actuar, pero eso no sirve de mucho en este mundo absurdo. ¿De qué sirve actuar? No quiero ser un huracán lleno de mentiras que arrase todo al pasar. Quiero mirarme al espejo y decir: Sí, soy yo.


¿Y tú cómo eres? ¿te gusta mirar a las estrellas? ¿Tienes la mirada perdida, tus ojos brillan? ¿Cómo te ríes? ¿Eres duro de mollera? ¿Le das vueltas a frases sin importancia? ¿Te gustan las aceitunas? ¿Te consideras un buen amigo?...
¿Piensas en mí? Intento convencerme a mí misma de que te conozco, pero no lo hago. Yo no te conozco. Yo no soy especial, yo soy prescindible. Yo soy la estúpida que te quiere. Yo soy ESA estúpida.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

Se sentó en el sofá verde antiguo y se puso unos cuantos cojines negros sobre la tripa, un vaso de vino estaba sobre la mesilla, meticulosamente colocado para no poder chocar con ello en un acto reflejo y derramaro. Pensaba. Llevaba esperándole todo el día, un puñado de horas, y tantos minutos como el reloj de arena pretendía mostrar. Se abrió la puerta con un ensordecedor chirrido, como era habitual, y apareció el . La mesa ya estaba puesta antes de su llegada, ella se había encargado de preparar algo que ellos consideraban "especial" . No sabían cuando esa palabra había entrado en su vocabulario.

-¿ Has hecho tú todo esto? , preguntó el mirandola con la vista cansada .
-Si … pensé que te gustaría..- Respondió ella tímidamente.
-Me encanta.
Cenaron evitándose la mirada y  hablaron de temas que no tenían alguna trascendencia en sus vidas, pero, al fin y al cabo, de eso se trataba la vida, durante un tiempo que se les hizo tan corto que ni se dieron cuenta.
-Oye...-Replicó él clávandole la mirada.
-¿Si?- Preguntó esperanzada.
-Yo.. no te voy a dar nada mejor de lo que me des tú …
-No importa… me basta con que estes conmigo.
-Sólo.. Sólo te he escrito unas palabras.
-Estoy ansiosa por oírlas.
Sacó un papel que estaba en blanco.
-Me da miedo decir algo equivocado…te quiero.
-¿Qué? ¿he oído bien? Repítelo.
-Te quiero.
-Nunca dejes de decirlo.
-Te quiero, te quierop, te quiero. - El aterrador silencio se había vuelto ahora algo dulce, algo bonito. Algo, por qué no, especial.
-Nunca había sido tan feliz en toda mi vida.- Y sonrió con su vista aún clavada en ella.
-Yo tampoco.- Los que sonrieron ahora fueron los ojos de ella.Y entonces se dio cuenta de que no había nada escrito en el papel. Estaba absolutamente en blanco.
-Y ¿ cuánto has tardado en escribir eso…?-
-Mm…mucho, muchísimo…
-No hay nada en el papel.
-Te digo lo que siento, no hacen falta papeles. No hace falta escribir nada. Y ahora, sal a la calle.
Y ella, sin dilación ni duda, salió con lo puesto, preguntándose qué era lo que tenía que ver en aquel barrio tan alejado del centro sin atractivo turístico, sin atractivo visual.
Y allí se encontró con toda la calle llena de fotos de ellos, y con pequeños papeles, esta vez con escritura, que ella no alcanzaba a leer.
-¿Ves ese de ahí arriba?- Le preguntó abrázandola por detrás. Ella miró hacia la farola que su dedo señalaba, en la que había colgado un pequeño cartel, que parecía más resistente que las demás fotos y otros papeles.
-Si.
En el cartel ponía Te quiero.
-Pues seguirá ahí hasta que alguien consiga descolgarlo.
-Eso es para siempre...
-Exacto. Para siempre.
 

Made by Lena