jueves, 2 de septiembre de 2010

Renuncio.

No soy diferente; tampoco soy igual. Fácilmente me encariño con las cosas que me demuestran aprecio, un poco de amor, supongo que me gusta que sea recíproco. Me cuesta creer que me quieran. Una frase que dijiste sin pensar y a la que tú no le das mayor importancia, para mí puede suponer un mundo; mi mete puede dejarla caer en cualquier inesperado momento, y pienso. Soy tozuda, cabezota. Callada, sonriente y distante cuando la ocasión lo requiere. Me miro mucho las manos cuando estoy sola en lugares públicos, sólo para dar la impresión de estar entretenida, sólo por eso. Adoro el maquillaje de ojos, el eye-liner negro sobretodo. Puede parecer superficial, bien, para mí no lo es; me hace sentir protegida. Soy fiel a mis amigos, o eso creo yo. Y fea, soy fea. Toco la guitarra, pero no soy un portento musical.  Dibujo, pinto, pero mucha gente lo hace mejor que yo. Y creo que se actuar, pero eso no sirve de mucho en este mundo absurdo. ¿De qué sirve actuar? No quiero ser un huracán lleno de mentiras que arrase todo al pasar. Quiero mirarme al espejo y decir: Sí, soy yo.


¿Y tú cómo eres? ¿te gusta mirar a las estrellas? ¿Tienes la mirada perdida, tus ojos brillan? ¿Cómo te ríes? ¿Eres duro de mollera? ¿Le das vueltas a frases sin importancia? ¿Te gustan las aceitunas? ¿Te consideras un buen amigo?...
¿Piensas en mí? Intento convencerme a mí misma de que te conozco, pero no lo hago. Yo no te conozco. Yo no soy especial, yo soy prescindible. Yo soy la estúpida que te quiere. Yo soy ESA estúpida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

 

Made by Lena